buscador y encontrador

agosto 26, 2009

Pensaba escribir de la edad y terminé con un beso: Cortázar

-Me disculpo si han recibido esto antes, pero he tenido problemas de blog-
Yo pensaba escribir sobre la edad, sobre el envejecer, quizá el temor que tenemos vos y yo, pero más vos que yo, de diferencias como estas.

Sin embargo, me detuve otra vez en Cortázar, aquel de Historias de Cronopios y de Rayuela, de este último -del que recuerdo ya poco-, "no pude" evitar lo que copio; además de traer a colación un video de Chris Isaack, Wicked Game y una bella foto tomada en Francia, misma que dio la vuelta al mundo ya hace varias décadas. En fin...

Toco tu boca
"Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí, para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender, coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca, y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y los ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos, el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo de aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.”
Rayuela, Julio Cortázar (1914-1984)

No hay comentarios: