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septiembre 17, 2010

Stop all the clocks

Aunque por ahora el blog no parece ser lo que le dio vida (no puedo hacer mucho por el momento), la ocasión amerita esto. ¿Lo conocen? digo a W. H. Auden, alguna persona lo comparó con los Nobel T.S. Elliot y W.B. Yeats, pero son tres tamaños y perspectivas diferentes. 


Rescato que comenzaría por el final, que me gusta más la versión inglesa que las traducciones castellanas encontradas (últimamente me gusta poco todo, he sido robada y disculpen realmente pero poco soy o poco estoy.)  En fin, intenten leerla a toda voz la versión en inglés y notarán lo que digo.

Stop all the clocks 
Parad los relojes, descolgad el teléfono.
Prevenid el ladrido del perro con un jugoso hueso.
Silenciad los pianos y, con apagado tambor,
sacad el ataúd 
dejad las plañideras llegar.
Que los aviones den vueltas en señal de luto
Escribid 
en el cielo el mensaje que: "Él ha muerto".
Poned en los blancos cuellos de las palomas de la calle un crespón,
Dejad q
ue los policías de tránsito lleven guantes negros.

Él
 fue mi norte y mi sur, mi este y mi oeste,
Mi semana de trabajo y mi domingo de descanso.
Mi mediodía, mi medianoche, mi charla, mi canción.
Creí que el amor duraría siempreMe equivoqué.

N
o quiero las estrellas: apagadlas todas.
Envolved la luna, desmantelad el sol.
Vaciad los océanos y los bosques arrasad.
Porque ya nunca nada podrá acabar bien.

Stop all the clocks 
Stop all the clocks, cut off the telephone,
Prevent the dog from barking with a juicy bone,
Silence the pianos and with muffled drum
Bring out the coffin, let the mourners come.
Let aeroplanes circle moaning overhead
Scribbling on the sky the message He Is Dead,
Put crepe bows round the white necks of the public doves,
Let the traffic policemen wear black cotton gloves.
He was my North, my South, my East and West,
My working week and my Sunday rest,
My noon, my midnight, my talk, my song;
I thought that love would last for ever: I was wrong.
The stars are not wanted now: put out every one;
Pack up the moon and dismantle the sun;
Pour away the ocean and sweep up the wood.
For nothing now can ever come to any good.

septiembre 10, 2010

Para no olvidar

entre humo y humo, entre agua y agua
entre cliente y cliente de la esquina usada
la puta dibuja mensajes al corazón

agradece el uso, disculpa el disgusto
sonríe al rayo y obvia el olor.
importa poco el derredor,
es una improvisación de jazz
donde todas las personas piensan mal

los clientes llegan y se van
las amantes son del rato y además ¿qué pensarán de las que escriben poesía, redactan cartas leen la newsweek e intentan soñar?

entre humo y humo, entre agua y agua
se corre el maquillaje pero aquí, no ha pasado nada.

septiembre 07, 2010

El olor de la lavanda

Allí Grenouille pasó 8 años de su vida donde se dio cuenta y enfatizó mas su don, un olfato inimaginable,
 pues él podía oler a las personas a una gran distancia, 
sabía donde estaban las cosas así estuvieran muy bien escondidas,
 poco a poco este pequeño desarrolló cada vez mas su sentido del olfato y
 gracias a él podía hablar pues solo conocía las cosas por su olor. Patrick Süskind

tomar con las manos la vida por el frente y la cintura,
atisbar la mirada,
hundir la lengua en las comisuras,
saborear los labios, 
respirar la piel,
latir por los poros,
acelerar el estómago,
partir con fuerza,
romper la distancia con ansias y sed.


me gusta la vida de esa forma.

septiembre 05, 2010

Días viejos

esta piel de cebolla
estos ojos transparentes
estas manos temblorosas
este equilibrio falso -muy alta está la grada-
este cuerpo sin tibiezas
esto de envejecer con dignidad es indigno

septiembre 03, 2010

Cuadernos sueltos: el peso de mis pensamientos

Cuaderno suelto I
las palabras son así de ligeras
entran por los oídos y se desvanecen
si logran llegar no van intactas
sino logran llegar ya no importa,
algo se pierde siempre en el camino

Cuaderno suelto II 
las palabras son como el polvo,
pueden incomodar, pueden causar alergia, pueden molestar al dolor/
solo pesan si han ingresado en vos,
si le das la carga de los sentimientos.

Cuaderno suelto III
palabras rojas, incendiarias,
pegajosas, insistentes, voluptuosas, detonantes,
pendencieras, militantes, revueltas me tienen la sien y las entrañas

Cuaderno suelto IV 
Pesan tan poco las palabras,
cuando era por cartas parecían tener más consistencia.
ahora que es por electrónico
1670 mensajes solo ocupan un 1% del espacio.
Pesan poco los sentimientos ...

septiembre 01, 2010

Memoria y esperanza

He comenzado a pensar que es cierto ese rumor de que con las "generaciones de ahora", no se puede contar. Digo entre otras cosas por eso de amplios conocimientos y pocas profundidades. Toneladas de información en frente y sin uso o memoria. Dedos índices desarrollados y muñecas algo dañadas. Acción-reacción-acción-reacción: querer resultados rápidos. Perder las ganas en el corto plazo. 

Lo que sucede con esto de los cambios generacionales es que cada vez que uno se vuelve  más "viejo" tiende a pensar que se es más sabio frente a los predecesores; sin embargo ya conocemos la respuesta.

La razón de sacar a colación el tema, puede radicar en el deseo llamado fuerza, lucha y ganas. Luchar es un factor fundamental para sobrevivir, para estar con otros, para abrirse camino, para sobrevivirse. Sino simple y sencillamente se abre paso a la muerte, sea esta diáfana, tranquila, llorona, suicida, pero termina siendo el destino de los vivos.

Yo quiero estar viva -aún no sé como lograrlo sin morir en el intento-, aún quiero construir eso que alimenta el soplo de vida, que otorga color, olor, sabor, textura y forma; lo que nos define como personas, lo que nos permite construir lazos en el tiempo y movernos, lo que no nos deja abandonarnos por la cobardía y la indiferencia y en alguna esquina esconde olor a decencia sin que sea secreto de salvación.

Yo quiero esa juventud para mi, la que a pesar del corazón con canas -como diría Benedetti- vibra y sabe luchar.

"¿Qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de paciencia y asco? (...)
también les queda no decir amén
no dejar que les maten el amor
recuperar el habla y la utopía
ser jóvenes sin prisa y con memoria
situarse en una historia que es la suya
no convertirse en viejos prematuros

¿qué les queda por probar a los jóvenes 
en este mundo de rutina y ruina? (...)
les queda respirar/abrir los ojos
descubrir las raíces del horror
inventar paz así sea a ponchazos
entenderse con la naturaleza
y con la lluvia y los relámpagos
y con el sentimiento y con la muerte
esa loca de atar y desatar

¿qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de consumo y humo?(...)
también les queda discutir con dios
tanto si existe como si no existe
tender manos que ayudan/ abrir puertas
entre el corazón propio y el ajeno/
sobretodo les queda hacer futuro
a pesar de los ruines del pasado 
y los sabios granujas del presente." 
Con los jóvenes en Memoria y esperanza, M. Benedetti.