buscador y encontrador

abril 30, 2012

Nuestras ilusiones

Suelo pasar más tiempo frente a una computadora, un libro y un periódico (en ese orden) que ante la televisión; además he dejado de lado el cine por equivocación y será tal vez por esa razón que la producción basada en la carta del padre a la hija, guión del actor y director francés Jacques Tati, la vi hasta hace pocos días.

A ritmo pausado, con sonidos que al menos a mí me recuerda películas europeas de la década del sesenta, avanza una cinta cargada de colores añejos, de imágenes con esa misma sensación, con un diálogo casi silencioso, con figuras en sepia que todos podríamos reconocer.

L'Illusionniste, como se llama, no es cine para quien tenga prisa, ni para quien no esté dispuesto a "cranear" o dejarse llevar por ciertos sentimientos. Es cine de momentos de cariño, algo de nostalgia, un poco de homenaje al fallecido Tati y, querer como crecer... Es cuando no está demás tener un amuleto rojo, aprender un truco, compartir un plato de comida, recorrer las calles de la vida, visitar un teatro, enamorarse de un viejo o de una joven y viceversa.

abril 21, 2012

Quisiera,
escribir un suspiro,
no estoy segura de que sea un respiro o una inhalación profunda,
o un aliento o tres segundos de pausa.
o un susurro lo suficientemente quedo para que apenas puedas percibirlo,
o lo suficientemente intenso para que tiembles y el mundo lo haga contigo.

Quisiera,
escribir un suspiro
que exorcise todas las melancolías, 
que llene el esternón y la vida, 
que reviente las lágrimas y abra los cielos,

Uno solo, uno que abra paso a la tregua y de inicio a la paz.

Fotografía del archivo personal



abril 06, 2012

Una Semana Santa

Uno de mis tantos vicios como bien saben algunos, es tomar fotografías a iglesias. Había dejado esto hace muchos años atrás, pero circunstancias contextuales me empujaron  a robar un par de fotografías al paisaje, no hacerlo hubiese sido algo tonto.

Esta semana es para el poco más de 1,165,714.000 millones de personas según la agencia FIDES (es decir 1 de cada 6 en el mundo), la Semana Santa o Semana Mayor. 

En estos lares, donde la religión católica llegó con los conquistadores de la península Ibérica, hay ciertos pueblitos más que otros llenos de color, esto en contraste con escenas oscuras, cristos cubiertos de sangre, imágenes dolorosas que año con año repiten como si realmente se expiara alguna culpa.

Yo que crecí en medio de tres mundos: protestante, católico y ateo, recuerdo por igual los vestidos de ángeles en medio del calor veraniego en donde me obligaban a estar de pie, los libros de colores con escenas bíblicas de los domingos de escuela dominical, las fastidiosas películas bíblicas (no niego que tengo un par que aún podría ver) y las noches jugando cartas, comiendo carne roja y sin duchar, como si fuera suficiente para desafiar el orden establecido.

Ciertamente, así como mis padres y sus ininteligibles vidas, el teléfono, lo libros, la televisión y la música, estas "fiestas" siempre estuvieron ahí. para aburrimiento, protesta o impase de una semana en especial para cada año y como tal atraen mi atención al menos 5 minutos de cada periodo.


Estaba pensando que me gusta más Guatemala, Antigua o Chichicastenango en Semana Santa. Supongo que por los colores. Aunque si lo pienso bien, nunca he estado en México o Perú para esas fechas y he olvidado casi por completo otros sitios. En fin, aquí como en otros lugares cuyas creencias están casi en el ADN, o se metieron a punta de golpe y años de insistencia, o quizá se colaron en el tuétano por sobrevivencia de unos y otros, o bien solo porque sea eso llamada Fé, un par de fotos de los cucuruchos.




Fotografías todas del archivo personal