buscador y encontrador

noviembre 30, 2015

¿Chau número qué?

Tres vueltas le quería dar al estómago
No se puede con tanto ruido: los cláxones de los autos, las pitoretas de las motocicletas, las competencias improvisadas,
el ronquido del vecino,
este cuarto temporal y de huida.

No se logra la vida con el  cuerpo y el alma
cuando se arde en fiebre y una
piensa que el corazón se sale a patadas del esternón.

En la cama: tu pareja, la que encontraste haciendo eso que vos solías tener...
si,  una imagina y no tiene fundamento, es neurosis de la moderna,
si se hace, pero no se entera, es verdad por omisión.
el asunto aquí es si una es notificada y por escrito
en medio de tu nada.

Parece que hay pocas estrategias y caminos a seguir: la salida
con olor de ropa diferente,
atando cabos y cortando nudos,
la vida sabe a otra cosa,

Acto siguiente: la crisis, las preguntas, la devolución de "chuicas" dicen las "doñas" del vecindario, a pura telenovela mexicana.
al final inevitable rumiar cada cosa.

noviembre 16, 2015

No hay tal mar

El mar no es nadie
solo existe aquí,
con ese disfuncional modo en el saludo,
el pensamiento de minuto y medio en la mañana,
al tener nombre y apellidos, licencia y registro médico.

Es,
cuando coloco flores en el dormitorio,
si escucho sus historias,
las de hijos idos y odios de las concubinas,
podría ser si la radio tararea canciones viejas, cursis
o soy yo cuando el jazz estalla mis arterias y el blues se sienta a las 10:35 pm.
en un silencio desesperanzador.

No hay nadie debajo de los arrecifes empujados a la superficie,
ni a la luz de los cuchitriles o al eco de la voz.
Sé que vive cuando pone la mirada dura
¿qué esperar?,
está maduro
ido,
desconectado,
salvado de excesos,
con ese miedo de los valientes
proveído por la suma de años.

Hay,
hambre y, ni un bocado,
hay arena,
pasto debajo de los pies,
el goteo habla de vivos,
si por mí fuera, desconecto todo.

Nota mental: buscar una nueva emisora.

noviembre 02, 2015

Día de Muertos: Solo la muerte de Pablo Neruda

Un poema de Neruda... primera vez que lo traigo a este sitio mío y que quizá tiene una mirada diferente a la que quiero compartirles, pero fue el mejor para este momento, hoy el día de la muerte, la señora calaca, la huesuda, la catrina, la parca, la dientuda; En estos días he sido afortunada y he podido participar en un taller impartido por Jesús Petlacalco de Proyecto Patrimonio México y ejecutado en el Instituto México

Han sido días de hacer y parte de ese hacer "es culpa del día 2 de noviembre, esa fecha que nos recuerda un sincretismo religioso maravilloso, una forma de ver la muerte con amor, de recordar a los idos con igual cantidad de amor, un deseo de una mejor vida.  ¡Lindo día!


Papel picado
Equipo cortador, picador, aramador

Solo la muerte

"Hay cementerios solos,
tumbas llenas de huesos sin sonido,
el corazón pasando un túnel
oscuro, oscuro, oscuro,
como un naufragio hacia adentro nos morimos,
como ahogarnos en el corazón,
como irnos cayendo desde la piel del alma.

Hay cadáveres,
hay pies de pegajosa losa fría,
hay la muerte en los huesos,
como un sonido puro,
como un ladrido de perro,
saliendo de ciertas campanas, de ciertas tumbas,
creciendo en la humedad como el llanto o la lluvia.

Yo veo, solo, a veces,
ataúdes a vela
zarpar con difuntos pálidos, con mujeres de trenzas muertas,
con panaderos blancos como ángeles,
con niñas pensativas casadas con notarios,
ataúdes subiendo el río vertical de los muertos,
el río morado,
hacia arriba, con las velas hinchadas por el sonido de la muerte,
hinchadas por el sonido silencioso de la muerte.

A lo sonoro llega la muerte
como un zapato sin pie, como un traje sin hombre,
llega a golpear con un anillo sin piedra y sin dedo,
llega a gritar sin boca, sin lengua, sin garganta.

Sin embargo sus pasos suenan
y su vestido suena, callado como un árbol.

Yo no sé, yo conozco poco, yo apenas veo,
pero creo que su canto tiene color de violetas húmedas,
de violetas acostumbradas a la tierra,
porque la cara de la muerte es verde,
y la mirada de la muerte es verde,
con la aguda humedad de una hoja de violeta
y su grave color de invierno exasperado.

Pero la muerte va también por el mundo vestida de escoba,
lame el suelo buscando difuntos;
la muerte está en la escoba,
en la lengua de la muerte buscando muertos,
es la aguja de la muerte buscando hilo.

La muerte está en los catres:
en los colchones lentos, en las frazadas negras
vive tendida, y de repente sopla:
sopla un sonido oscuro que hincha sábanas,
y hay camas navegando a un puerto
en donde está esperando, vestida de almirante."