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septiembre 20, 2023

Alejandra Pizarnik

 Encontré esto de Pizarnik a quien leo de manera esporádica, ella duele cuando es leída, pero resume de una forma muy sencilla fragmentos de vida. Hace tiempo que no intento buscar las razones porque no tomamos las decisiones, las acepto de manera estoica (que no soy), o lo que es igual, suelto las manos, esas manos que son fundamentales para mí.


"A veces también se me acaban las sonrisas para ti,

a veces también se me acaban las ganas de escribirte.

Pero te quiero,

ojalá lo entiendas, siempre te quiero;

pero a veces mis abrazos no tienen calor y mi boca no sabe qué decir...

Pero te quiero,

siempre te quiero, cuando no te convengo, cuando no me soportas, cuando te odio, te quiero".

julio 31, 2010

Cerrando julio

They are the proof that something was there and no longer is, like a stain. And the stillness of  them if boggling. 
You can turn away but when you come back they'll still be there looking at you. Diane Arbus.

Este julio ha estado muy cargado, sigue denso para mi y no es que me disgusten este tipo de emociones, sino que a veces parece que me falta más entereza, solo no la encuentro o se escapa. Puedo poner una cara algo escultórica, bien rociar los días de aire fresco o de temas entretenidos. Lo hago, he de decir las tres cosas y más, pero no siempre se consigue el propósito y es más sencillo distraerse en la vida de los otros...

Ha llegado a mi buzón, motivado por uno de estos post y más allá, un poema que fue escrito para una mujer quien murió en este mes de julio. Fotógrafa estadounidense que se dedicó a retratar a los marginados, a cuestionar lo bello, a sentar línea respecto a la luz. No les invito a hurgar en su vida, sino a tratar de entenderla y vivirla con sus ojos. Hablo de la fotógrafa Diane Arbus y el poeta Howard Nemerow
"Mi querida, me pregunto si antes del fin
pensaste en aquel juego de niños
al que seguramente jugaste, en el que
corres por encima del estrecho muro de un jardín
imaginando que es la cima de una montaña
con insondables precipicios a ambos lados
y cuando sentiste que perdías el equilibrio
saltaste, porque temías caer, y pensaste
sólo por un instante: Es ahora cuando muero.
Eso fue hace una vida. Ahora ya no estás,
te negaste a seguir jugando el juego de los adultos
en el que, manteniendo el equilibrio en la cima que corona la oscuridad
se sigue corriendo sin mirar abajo
y nunca se salta por termo a caer." Howard Nemerow
          
Las fotografías son: Portrait. Jorge Luis Borges. Hand grenade. Children in  New York. Hermaphodite and dog in carnival.

julio 26, 2010

A ojos cerrados

De las tierras cercanas (no me referiré al sur o el norte) y respecto al cine, yo hasta ahora le he tenido poca fe la producción centroamericana, he huido del mexicano con muy contadas excepciones, no he llegado a ver nada venezolano y lo más cercano de nuestros vecinos caribeños ha sido algo perdido de Cuba, me confieso una crítica negativa.

El asunto aquí es que yo soy una ignorante profunda, quien podría pensar que hacer cine es como hacer pompas de jabón si se tiene un "soplador" de buena calidad. Puede ser que me he acostumbrado a los cortos animados hechos por estos lares y cuya calidad está más que "buenérrima", la producción en largo metraje cuesta, tanto como sostener sobre los hombros por más de una hora un saco de aguas en movimiento. Siempre se moja uno.

Los diálogos son importantes en las películas, e inclusive hay momentos en que parecen decirse palabras futuristas, casi bíblicas, líneas inolvidables y para recordar en la historia. Sin embargo, guardar silencio para luego usar la música como el espacio de diálogo, se podría decir que es más complejo.

Por estos días, he andado en el cine, al que tengo más que abandonado y sustituido por una pantalla plana, demasiado escandalosa pero útil que tenemos en casa. Me di una tremenda sorpresa, una cálida sorpresa con "A ojos cerrados."

He visto una de esas películas que son tan cortas, pero no podrían ser más extensas. Una de esas cuyos altibajos de colores dan la impresión de que la mitad fue expuesta al sol intenso y la otra mitad se salvó del mismo cuando la cinta fue tirada en la parte de atrás del auto. Lo que quiero decir es que podría mejorarse sí,  sin embargo esta y a pesar de ser novata, merece ser vista y sobretodo escuchada.

A ojos cerrados dura un poco más de una hora y algunos minutos, un encuentro de tarde con la vida y la pequeña gran muerte, Cinta que está pintada de espacios comunes para quienes conocen América Central y ciertos espacios más íntimos de un país llamado Costa Rica. 

Me alegro que me hayan provocado a ir, me alegro de la compañía de esa noche, me alegro de haber salido a la calle otra vez, me alegro de la gente joven que mira al mundo con esos ojos y cuentan las historias de viejos.

julio 18, 2010

Necesito creer

Sí necesito creer que hay futuro, que lo tenemos, que podemos, que más pronto que tarde se saldrá de esto. Hoy lo necesito más que ayer y más que antes.

Credo, Jorge de Bravo 
"No acostumbro a decir amo, te amo,
sino cuando el amor me inunda todo
desde los ojos hasta los zapatos.
Mi cuerpo es una sola verdad y cada músculo
resume una experiencia de entusiasmo.
       
Una vez dije: ¡sufro! Y era que el sufrimiento
agitaba a mi lado sus cascos de caballo.
       
Y siempre digo: espero. Porque a mí me podrían
arrancar el recuerdo como un brazo,
pero no la esperanza que es de hueso
y cuando me la arranquen dejaré de ser esto
que te estrecha las manos."
(...) 

junio 03, 2010

De Aimar ilustrado parafraseando Borges

"Hurto" de alguna forma una ilustración de uno de mis primeros sitios de visita, alguien que imagina y sueña, que construye con cola, crayones, telas, plumas y revistas: Aimar ilustrado. He tomado esto prestado porque me acordé de un amante de Borges, que los hay varios, pero pocos bien leídos y porque yo también quisiera pensar que hay un paraíso. 

"Siempre imaginé que el Paraíso sería algún tipo de biblioteca"
JORGE LUIS BORGES
Ilustración para la revista Beglam, mayo 2010.

mayo 18, 2010

Delibes

Para alguien que "mamó" de un currículo tropical, mis lecturas de hace décadas estuvieron plagadas de escritores españoles, casi podría hacer una lista, Garcilaso de la Vega, Santa Teresa de la Cruz, Miguel de Cervantes, Lope de Vega, Tirso de Molina, Calderón de la Barca, Alarcón, Bécquer, Pérez Galdós, Ramón María del Valle Inclán, Miguel de Unamuno, Pío Baroja, Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez, Ortega y Gasset, León Felipe, Alejando Casona, Pedro Salinas, García Lorca, Luis Cernuda, Francisco Ayala, Camilo José Cela, Torcuato Luca, Miguel Hernández, Buero Vallejo y que se yo. No se crea que esto fue por pura iniciativa, todo comenzó con los estantes amplios e interminables que mi tía tenía en su casa, de estos los libros autorizados, luego el hurto temporal de aquellos que se iban dentro de mi falda.
Me inicié leyendo cualquier libro por portada y que no muy extenso; también algo de poesía, pues mi madre tiene un libro de Campoamor que era de mi abuela y ella nos leía de allí, luego nos lo prestaba. Así se comenzó, no era fácil, a veces comprendía poco, por no decir que no comprendía, entre diccionario, enciclopedia y ciertas preguntas capciosas a mis hermanos comencé a leer. 


Delibes me gusta, pues quizá sea parte de ese ambiente rural que no es ajeno a mi, pero distinto por su geografía, todo para decir que me identificaba... Murió como todos bien sabemos hace ya un par de meses atrás y había dejado este "post" en borrador, lo he desempolvado pues no quería no darle algún homenaje aunque pobre desde este blog, no por eso homenaje.  


"Pero a Daniel, el Mochuelo, le bullían muchas dudas en la cabeza a este respecto. Él creía saber cuanto puede saber un hombre. Leía de corrido, escribía para entenderse y conocía y sabía aplicar las cuatro reglas. Bien mirado, pocas cosas más cabían en un cerebro normalmente desarrollado. No obstante, en la ciudad, los estudios de Bachillerato constaban, según decían, de siete años y, después los estudios superiores, en la Universidad, de otros tantos años, por lo menos. ¿Podría existir algo en el mundo cuyo conocimiento exigiera catorce años de esfuerzo, tres más de los que ahora contaba Daniel? Seguramente, en la ciudad se pierde mucho el tiempo -pensaba el Mochuelo- y, a fin de cuentas, habrá quién, al cabo de catorce años de estudio no acierte a distinguir un rendajo de un jilguero o una boñiga de un cagajón. La vida era así de rara, absurda y caprichosa." El Camino

mayo 16, 2010

Gurney Journey


Visitando sitios, de los que están en el blog. Navegando como sino tuviera rumbo y en otros casos algo voyerista, me suelo encontrar con cosas interesantes que otros cuelgan por ahí. De estos una imagen que les dejo de un lugar llamado Dado del Arte, finalmente la extrajeron de la página de un sujeto llamado Gurney Journey y saben... la página del artista, ilustrador, investigador de historia está interesante, por ahora su versión simplificada de la historia del arte. Ya me contarán el nombre de su pintor favorito.

Un abrazo de domingo.

diciembre 27, 2009

Canción de la Vida Profunda - Porfirio Barba

El "post" no es de fantasías, de las vidas cotidianas, de las guerras, hambres olvidos que corren. Lo que les comparto, un amigo me lo"regaló" a inicios de este año, es de Porfirio Barba Jacob es decir Miguel Ángel Osorio, quien alguna vez en su peregrinaje estuvo en estas tierras centroamericanas, cerrando sus días en México. La pintura es de Giacomo Balla -Streetlight-
para la luz del camino.

Para vos, para mi, para nosotros, para todos deseos de vida.

Hay días en que somos tan móviles, tan móviles,

como las leves briznas al viento y al azar...


Tal vez bajo otro cielo la Gloria nos sonría...
La vida es clara, undívaga, y abierta como un mar...

Y hay días en que somos tan fértiles, tan fértiles,
como en Abril el campo, que tiembla de pasión;

bajo el influjo próvido de espirituales lluvias,
el alma está brotando florestas de ilusión.

Y hay días en que somos tan sórdidos, tan sórdidos,
como la entraña obscura de obscuro pedernal;

la noche nos sorprende, con sus profusas lámparas,
en rútilas monedas tasando el Bien y el Mal.

Y hay días en que somos tan plácidos, tan plácidos...
-¡niñez en el crepúsculo! ¡lagunas de zafir!-

que un verso, un trino, un monte, un pájaro que cruza,
¡y hasta las propias penas! nos hacen sonreír...

Y hay días en que somos tan lúbricos, tan lúbricos,
que nos depara en vano su carne la mujer;
tras de ceñir un talle y acariciar un seno,
la redondez de un fruto nos vuelve a estremecer.

Y hay días en que somos tan lúgubres, tan lúgubres,
como en las noches lúgubres el llanto del pinar:

el alma gime entonces bajo el dolor del mundo,
y acaso ni Dios mismo nos pueda consolar.

Mas hay también ¡oh Tierra! un día... un día... un día
en que levamos anclas para jamás volver;

un día en que discurren vientos ineluctables...
¡Un día en que ya nadie nos puede retener!

diciembre 02, 2009

Entre siempre y jamás

El primero de diciembre como cada año, mis padres celebran sus más de 50 aniversarios de matrimonio. movidos ellos entre tiempos donde algunos pedíamos a gritos su divorcio y otras temporadas partidos en lágrimas de pensarlo.

Su vida ha oscilado entre Siempre y Jamás, como el poema de Benedetti. En un mundo donde la ilusión se les ha partido por pedazos y aún así siguen se aferran a ciertas partes de sus sentimientos mutuos y individuales, con ese ímpetu casi escandaloso de los jovenzuelos.

Sus oleadas de amor y odio han sido notorias y entre estas crecimos sus hijos, pero no pensemos que las oleadas significaron gritos o vasos quebrados, esos los causamos nosotros con el crecer. Más bien fue respirar historias de siempre para siempre como promesa única a la par del deseo incidioso de quebrar todo para nunca jamás y dejar una segunda parte para otras vidas.

Confirmo, entre siempre y jamás han intentado una historia de cuento que más se parece a cualquier otra cosa, viven y sobreviven, se buscan-encuentran-abandonan-celan-distancian-acercan y así como les digo, se les va la vida.

Yo me pregunto ¿qué será con nosotros?

Entre siempre y jamás
el rumbo el mundo oscilan
y ya que amor y odio
nos vuelven categóricos
pongamos etiquetas
de rutina y tanteo

-jamás volveré a verte
-unidos para siempre
-no morirán jamás (...)
-(y hasta la fe dialéctica
de) por siempre jamás
-etcétera etcétera

de acuerdo
pero en tanto
que un siempre abre un futuro
y un jamás se hace un abismo
mi siempre puede ser
jamás de otros tantos

siempre es una meseta
con borde con final
jamás es una oscura
caverna de imposibles
y sin embargo a veces
nos ayuda un indicio

que cada siempre lleva
su hueso de jamás
que los jamases tienen
arrebatos de siempres

así
incansablemente
insobornablemente
entre siempre y jamás
fluye la vida insomne
pasan los grandes ojos
abiertos de la vida

Mario Benedetti

agosto 30, 2009

De desayuno: Gran Torino

Hay personas que temen envejecer -quizá en algún momento todos tememos aunque por diferentes razones-, hay algunos que se resignan y toman esto con esa normalidad del ciclo de vida y muerte, otros se resisten y luchan de curiosas e inverosímiles maneras para acelerar o detener el envejecimiento.

Todos somos historia, formamos parte de la historia, aunque nos enteremos o no. Todos somos parte de un espacio y un tiempo que retratamos de diferentes formas, con fotografías, con música, con frases, con cartas y correos electrónicos, con noticias y vídeos, con piezas de recuerdo -pequeños zapatos, recortes, algún amuleto y hasta juguetes o electrodomésticos- cada uno lleva una carga de sentimientos de los que rompen en dolor, en sonrisas o en llantos, testigos todos, parecieran tener en común la permanencia, como esos botes en el mar de la memoria que se ven constantes y frescos, como recién puestos a navegar a pesar del tiempo.

Este domingo para la hora del desayuno y gracias a que rentaron varias películas, tuve el chance de ver lo último producido, dirigida y protagonizado por Clint Eastwood que, por estos lares llegó en el 2009, me refiero a "Gran Torino"

Rentaron en la tienda del supermercado la cinta, de la cual esperaba el drama, quizá un golpe bajo por aquí o por allá, hasta un poco de aburrimiento, pues soy algo distraída. No espera la joya que encontré.

Ciertamente todo tiempo y cultura tiene sus estereotipos, sus temores, estigmas y más; pues está compuesta por personas que producen o reproducen conocimiento, formas, mensajes, alusiones y prácticas. Por eso no pasa en la historia esta producción, que finalmente tiene todo del presente.

Para quienes aún no la han visto, tomen el tiempo; para quienes piensan que Eastwood está viejo, eso es cierto, pero no por eso es "pendejo" o de mal sabor.

Nota: Las dos imágenes de hoy son la de Kyle (hijo mayor) y la de Scott(hijo menor) del mencionado director, quienes participan en Gran Torino.