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agosto 20, 2016

Eunice Odio

No sé por qué, pero la leo solo después de muchas semanas juntas, una página, luego la vuelvo a dejar en el estante de importantes ya leídos y que jamás serán archivados, a pesar de que aún me faltan páginas en los tres tomos de sus obras completas.

Yo quisiera ser niña
"Yo quisiera ser niña
para acoplar las nubes a distancia (...)
Para ir a la alegría por lo pequeño
y preguntar,
como quien no lo sabe
el color de las hojas
Cómo era? ..."
Tres canciones de soledad
"Escucha ese silencio,
Es un silencio anclado, (...)
Escucha ese silencio
que se pega a tu carne,
Es un pasar de humo a tu costado (...)"

Declinaciones  del monólogo
I
"Estoy sola,
muy sola,
entre mi cintura y mi vestido
sola entre mi voz entera,
con una carga de ángeles menudos
como esas caricias
que se desploman solas en los dedos.
En mi pelo, a la deriva,
un remero azul,
confundido,
busca un niño de arena,
Sosteniendo sus tribus de olores
con un hilo pálido,
contra un perfil de rosa,
en el rincón más quieto de mis párpados
trece peregrinos se agolpan."

stand getz y bill evans 

julio 31, 2009

Para cerrar julio "sola"

En estos días me apropié de fotografías de Magalena Wanli, reconozco que me parecen cercanas, y le agradezco a un bloguero el haberlas publicado en su espacio.

Digo cercanas, quizá porque son y me recuerdan lugares que he visitado hace mucho tiempo. Esta última imagen que "guindo" hoy, es exactamente igual -claro cambia tamaño e intensidad de la luz-, a una que tomé hace una década justa en el norte de Canadá, en puro verano, con dientes de león por doquier y florecillas amarillas como estas. No pude evitar sentirme algo en casa...

Al inicio de julio había dicho que colocaría cosas de gente centroamericana, lo más que he logrado hacer es colocar un poeta y un escultor costarricense, algunas noticias de Honduras y ciertas cosas del ánimo rodante.

Como si fuera tarea incumplida y con el pretexto de lo dicho, tomo algo de Eunice Odio (1922-1974), mujer de hace décadas atrás que junto con la fotografía me dejan la sensación de una "sola" no por eso soledad o quizá sí.

Declinaciones del monólogoI
"Estoy sola,
muy sola,
entre mi cintura y mi vestido,
sola entre mi voz entera,
con una carga de ángeles menudos
como esas caricias
que se desploman solas en los dedos.
Entre mi pelo, a la deriva,
un remero azul,
confundido,
busca un niño de arena.
Sosteniendo sus tribus de olores
con un hilo pálido,
contra su perfil rosa
en el rincón más quieto de mis párpados
trece peregrinos se agolpan"