y correrás a lo largo de ciudades, senderos, montañas y ríos
y serás inconsciente de la vida y la muerte
y la fortuna te dará la espalda
y apretará delicadamente el canal del cuello
y cuando estés sin aire te soplará suspiros
y sentirás alivio
y serás nuevamente inconsciente
y estarás eufórico
y borrarás los errores, los temores y el hastío
pero no te preocupes,
pagarás el precio por estar vivo.
Esto es del pasado, lo escribí para un post de días futuros, pero en este presente hay muerte y ya no es solo la de una parte del alma, sino es de esa que llega avisando con caminar de elefante, esa que uno cree poder evadir cuando es joven, cuando se piensa con futuro, cuando quiere creer que de alguna forma lo inevitable se puede vencer.
Descansemos, llegó la señora calaca y otra vez el músculo ha tenido un pequeño paro.
Max, la cadena Cinemax del cable tiene desde hace bastante tiempo un servicio de películas alternativas (diría una ventaja significativa de estar globalizado y conectado). En el caso de Latinoamérica presenta cintas de aquí y de allá, que si las tremendas brasileñas, las sicológicas argentinas, las coreanas y japonesas de suspenso o las libanesas: Lo cierto es que este es un cine a la carta que nos expone a formas de ver, sentir y mirar el mundo, sin pelearse por la copias desgastadas de los vídeos (cuando las encuentras), o las versiones baratas llamadas piratas, que son como la lotería, un azar la calidad de lo que obtienes.
Me gusta el cine argentino, quizá por el análisis introspectivo y retrospectivo que hace, lo cierto es que lo que he visto, sin excepción se caracteriza por ese lente. Quizá por esa razón me gusta y a la vez no siempre lo veo, pues esa cantidad de análisis y crisis no hace tanto bien a mi alma...
Por otra parte y como bien saben, la música es algo que me acompaña, es como una de esas compañeras que no desisten, que se acalla o que habla por mi. En mi caso crecí con tres géneros: el tango, la música clásica y el rock en inglés, gracias a mi padre, mi madre y mis hermanos mayores (no esto no es una historia familiar). Algunas veces me gustaron estos tipos otras no, lo cierto es que en estas alturas (claro con sus excepciones) es lo que aún escucho.
La cantante de tango, nombre de una película del 2010, es una de las películas que Max está transmitiendo por estos días, si tienen el chance de mirarla, tomen el tiempo. No les aseguro que la amarán o la odiarán. Lo que sí sucederá es que la reconocerán o se reconocerán con algo de olor de Gardel y Piazzolla, puede que ser tenga algo de "poesía" (no lo tomen tan literal) y un tanto de disfrazada cursilería (es que ya me he añejado con estas cosas), más a cambio obtendrán todo lo demás y además un intima fotografía. Véanla, quizá se animen y concuerden conmigo. Yo que ahora tengo tiempo, aquí les espero para saber que piensan.
No quiero soñar dos veces las mismas cosas, no quiero contemplarlas sabiamente (...)
Xinia dijo algunos años atrás: aquí todos hemos salido dañados, pero hay dos personas en particular quienes ya conocemos sus nombres. Cuando todo cambió se les murió la mitad del corazón, una parte se detuvo aunque no asumamos la responsabilidad, pero nunca más serán lo mismo.
Todos los sujetos de la mesa esquineada en la cocina, con tragos en mano bebimos y asentamos aunque comprendíamos tan poco, todos con nuestra propia versión. Vale que todos teníamos algo de alcohol en el cuerpo: cabeza, músculos, sentidos, pechos y poros (hay que confesar que no tanta bebida como en los viejos tiempos), porque sino hubiésemos echado todo a la borda y llorado en unísono.
Y después de eso, ¿qué queda?, parte de la respuesta sería.
Las imágenes son del archivo personal: (1)volcán Chimborazo, (2-3) Ruinas cultura Inca-tumba Cañari (6)Valle postglaciación Parque Nacional Cajas