"La soledad, el sentimiento y conocimiento de que uno está solo, excluido del mundo, no es una característica exclusivamente mexicana. Todos los hombres, en algún momento de sus vidas, se sienten solos. Y lo están. Vivir es separarse de lo que fuimos para acercarnos a lo que seremos en el futuro. La soledad es el hecho más profundo de la condición humana." - En 'El Laberinto de la Soledad'.
Una de las bases de mi formación ha sido la historia. En la adolescencia, un profesor me enseñó esta a través de la mitología, impulsándome a conocer un poco más de todo hasta quedar atrapada. Historia antigua es una de mis favoritas y allí los pueblos del mar. De la edad media, aunque suene morboso, la Santa Inquisición, además de vida cotidiana y redes sociales, que es algo a lo cual se ha dado valor de manera reciente. La introducción quizá es para excusar mi crítica.
En mi año de lectura de "grandes libros" por tamaño, recién finalizo Malinche. Este fue un regalo de cumpleaños (de años pasados) dado con mucho amor. Al principio yo pensé que me topaba con el libro de Laura Esquivel, más este es de un autor español llamado Edward Rosset (padre inglés de allí el apellido.)
Aquí viene el pero: lamento decir que tenía tanto tiempo de no leer algo cuyas páginas me dejaran la sensación de pudo ser. Quizá porque estoy marcada por libros de historia del calibre de la Conquista de México de Hugh Thomas, o Salvador de Madriaga. Lo relacionado con lo cultural y demográfico en libros como el Costo de la Conquista de Linda Newson, o las Crónicas de las indias. Bien por novelas como Tenochtitlán de José León Sánchez o por la forma en que escribe Latinoamérica sobre el asunto.
Menciona los acontecimiento claves: desde el embarque de Hernán Cortés desde España y luego desde el Caribe hacia su destino, el cual lo convertiría en el más grande conquistador de todos; hasta la forma de ver el mundo por Bartolomé de las Casas; pasando por Malinche, la mujer que fue esclava, intérprete, secretaria, prostituta, amante y madre del primer mexicano. Por momentos usa un lenguaje tipo Jane Austin y otros tan europeizado (sí ya sé que es una novela ambientada en "ese" momento) que si bien podría tener "buenos monólogos internos", a mi juicio tiene esa carga de "moderna" con estereotipos "postmodernos" arrastrados.
Sin embargo y como no estoy hablando de manera positiva de algo y reconozco que hay otras visiones, quizá algunos de ustedes sean lectores de este señor, les anoto después de tanto buscar, un enlace con una crítica "que te cagas" por poco y lo llama libro de culto.http://www.hislibris.com/malinche-edward-rosset/ . Quizá sea cierto, mas en mi biblioteca de hoy, no. ¿Puede ser mañana?
Lo cierto es que, quizá todos en algún momento hemos hecho o hemos pensado como Cortés: quemar las naves como una medida desesperada para no regresar atrás.
A propósito de todo y saltando de tema e inspirada por lo anotado aquí, les invito a leer a Octavio Paz con un análisis fantástico y atemporal de 1950 llamado "El Laberinto de la Soledad", en donde expone como la sociedad mexicana tiene una visión trágica que ha mantenido a través de las generaciones, viniendo de ese inconsciente colectivo de la malinche y la violación: sus hijos (los mexicanos). Quienes hayan vivido en México, quienes son mexicanos o quienes quieren adentrarse un poco en este tema, deben darle su debida lectura. Allí aparece un capítulo llamado "Los hijos de la Malinche."
Na, gracias por el libro, sabes lo que significa...