Mayo es un mes de transición, de inicio, de crecimiento entre lluvias y calores, tiempo de limpieza, de encontrar verdor, de dar las gracias pues el sol tostador mermará un poco y la renovación llegará.
El mes abre paso a la llegada de unos seres pequeños, torpes que chocan contratodoytodo, nocturnos atolondrados por las luces de las casas, jóvenes en espera durante meses saciando el hambre hasta que están listos para salir, lográndolo después de un año.
Los abejones de mayo como se le llaman en este lugar del mundo, son menos vistosos que las mariposas y las zompopas apuradas a aparecer durante estos primeros días del mes. Sin embargo y a pesar de su sencillo color, su nada atractivo caminar, su torpeza absoluta, su estado efímero, son los abanderados nocturnos que salen de su escondite tenebroso para a avisarnos que la vida se renueva, que están aquí, que siguen vivos, que buscan a sus otros, que se apuran a querer y a dejar legado de vida a pesar de todo.
Bienvenidos.
3 comentarios:
Amados por los egipcios, hay una hermosa novela de Manuel Mujica Lainez llamada justamente "El escarabajo" que es maravillosa.
Un saludo
No suelen gustarme pero después de leerte ya los veo de otra forma.
Besos.
Edgar Alan Poe también tiene un relato curioso e interesante (como todos los suyos) que se titula "el escarabajo de oro".
Me encanta la música que has seleccionado. Un día tienes que decirme cómo haces eso en l blog....
Besos
Iraide
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